WSDG ayuda a crear una inmersiva experiencia 360º en el Rhyality

El Rhyality Immersive Art Hall ofrece un viaje inmersivo que muestra de forma espectacular las vistas y los sonidos de las cataratas Rheinfall. Para su realización se ha apostado por la experiencia en acústica y diseño de sistemas de WSDG.

Dost Architektur ha recurrido a WSDG para crear una experiencia de 360 grados en uno de los tesoros naturales de Europa. Situada en el norte de Suiza, la Rheinfall es una de las cataratas más grandes de Europa y atrae cada año a miles de visitantes que acuden a contemplar su belleza natural.

Rhyality Immersive Art Hall, situado justo encima de las cataratas dentro de un complejo industrial remodelado, busca compartir esta experiencia durante todo el año de una forma nueva. Ofrece un viaje totalmente inmersivo que muestra de forma espectacular las vistas y los sonidos de las cataratas, utilizando lo más innovador en tecnología de audio y vídeo de 360 grados para dar vida a esta experiencia.

El proyecto fue concebido por el artista conceptual y productor cinematográfico Beat Toniolo y el empresario turístico local Hanspeter Weder, que incorporaron al estudio de arquitectura Dost Architektur para hacer realidad su visión del complejo.

Este estudio reunió a un equipo diverso de expertos para llevar a cabo el trabajo y recurrió a sus colaboradores habituales, WSDG (Walters-Storyk Design Group), para que aportaran al proyecto su experiencia en acústica y diseño de sistemas.

Una visión de una maravilla natural

La base de la experiencia del visitante en Rhyality es la sala principal, con capacidad para 200 personas, en la que se exponen las obras visuales de la sala de arte inmersivo, en concreto su obra insignia: Las cataratas del Rin en 4 estaciones.

Esta representa un año en la vida de las cataratas a través de una presentación combinada de composiciones de vídeo, música, grabaciones de campo y narración.

Diseñar una experiencia intuitiva para el visitante, que encajara en las salas existentes del complejo fue una de las principales preocupaciones de los directores de proyecto de Dost.

«El espacio existente era una especie de lienzo en blanco que había que preparar para una experiencia de 360 grados», explica Julian Tschanen, director de proyectos y diseñador de interiores de Dost. “Era necesario un planteamiento muy multidisciplinar para crear la atmósfera adecuada que, además, tuviera un flujo obvio para los visitantes que entraran a vivir la experiencia. Desde el principio, pensamos que sería un proyecto muy colaborativo que se beneficiaría de la unión de muchas mentes diferentes para hacerlo realidad».

Para la tarea de ingeniería acústica y electroacústica de la sala, que sería necesaria para diseñar los sistemas inmersivos de audio y vídeo críticos para la presentación, Dost recurrió a sus socios WSDG, que han creado soluciones inmersivas similares en lugares como el Museo Nacional de Qatar, el Shanghai State Grid Pavilion y el salón de eventos Aura Club.

«En el caso de Rhyality tuvimos que afrontar el desafío de lo que significa hacer sonido de 360 grados», explica Tschanen. “Siempre tenemos en cuenta la acústica y el diseño de sistemas desde el principio en proyectos como estos, y a menudo recurrimos a WSDG para que nos brinde la experiencia necesaria. Fue una parte fundamental de la visión de este proyecto y nuestra colaboración con ellos nos permitió desarrollarlo juntos».

Detrás de escena

El diseño acústico de Rhyality planteó el desafío sobre cómo diseñar una sala con la acústica adecuada sin que las pantallas de proyección de las paredes causaran reflejos no deseados que perturbaran la experiencia.

Para solucionar este problema, el equipo de WSDG recomendó una tela teatral especial fabricada por Gerriets para lograr el efecto deseado.

«El uso adecuado de los materiales en estos proyectos puede marcar una gran diferencia en su funcionalidad», comenta Gabriel Hauser, director de Acústica de WSDG. “La ventaja de este tejido especial es que es adecuado para proyección pero también acústicamente transparente, lo que significa que podemos usarlo para ambos propósitos sin que el tratamiento de absorción o los altavoces sean visibles para los visitantes. Todo está oculto detrás de la pantalla, lo que mantiene la experiencia completamente fluida».

El diseño de los altavoces de Rhyality se creó en colaboración con Holophonix y utiliza 98 altavoces en total para una experiencia de audio totalmente inmersiva. Detrás de las paredes se encuentran dos capas, una a 1,2 metros y la segunda a 3,2 metros de altura, además de los altavoces del techo para un tercer nivel de altura.

Todos los altavoces cuentan con un diseño coaxial para permitir una respuesta fuera del eje precisa e inusualmente amplia. Gracias a Dante Backbone y a las pantallas de proyección acústicamente transparentes, se puede añadir fácilmente altavoces cuando sea necesario.

El procesador Holophonix permite hasta 128 canales de reproducción y es capaz de utilizar todos los algoritmos inmersivos relevantes, como Wave Field Synthesis (WFS), Ambisonics y otros, junto con un potente motor de reverberación algorítmico multicanal.

La instalación del sistema corrió a cargo de Bild+Ton. «Este es nuestro primer proyecto que utiliza la tecnología Holophonix y fue extremadamente efectivo para producir la experiencia inmersiva deseada», explica Hauser. “El enfoque de Holophonix fue rentable, especialmente considerando la disponibilidad de 128 canales de audio en la sección de salida (formato Dante). Además, forma parte de Amadeus Audio, un fabricante de altavoces francés, y, por tanto, puede ofrecer un sistema hecho a medida de principio a fin. Se brindó soporte directo a través de Holophonix (París), incluidas muchas actualizaciones de software, así como del distribuidor local suizo de Amadeus Audio”.

Ampliando las posibilidades

Rhyality, actualmente operado y curado por el director de arte Devon Miles, se ha convertido en un destino popular y ha ampliado su oferta para incluir otras presentaciones de vídeo inmersivas, además de servir como una sala de eventos.

«La idea evolucionó de un espacio temporal a uno permanente con posibilidades de uso muy amplias gracias a la visión del equipo que coordinamos y reunimos», afirma Tschanen. “Pasó de ser un lienzo en blanco como idea a un lienzo en blanco de un espacio inspirador que puede utilizarse para una amplia gama de presentaciones y programación de eventos interesantes”.

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