Metsä Fibre steuert die Produktion seiner Bioprodukte über eine Videowand, die mit Matrox-Technologie ausgestattet ist

En la sala de control de la nueva fábrica de Äänekoski se ha instalado un videowall de 6,5 metros de ancho para monitorizar las operaciones de producción. En esta infraestructura se han utilizado tres tarjetas Matrox Mura IPX y dos C680, que alimentan las 12 pantallas giratorias, donde se ven múltiples fuentes de vídeo simultáneamente.

Metsä Fiber, división del Grupo Metsä, es el segundo productor mundial de pulpa de celulosa y con las miras puestas en seguir siendo líder en su mercado, vor kurzem, ha inaugurado una fábrica de bioproductos en Äänekoski (Finnland). Con una capacidad de producción anual de 1,3 millones de toneladas de pulpa, junto con otros bioproductos como el aceite y la trementina, marca una nueva era para la industria forestal.

La fábrica utiliza sistemas de automatización y monitorización digital de vanguardia para sus líneas de producción de corte de madera, lavado, Etc. Para complementar esto, Metsä Fiber buscaba una solución de videowall que le permitiera monitorizar sus operaciones de producción. Tomando la recomendación de uno de sus principales proveedores, Andritz Oy, Metsä Fiber contactó al integrador local de sistemas, Elkome Systems, para la instalación de este soporte de visualización que apostó por la tecnologçia de Matrox-Grafik zur Durchführung des Projektes.

Metsä Fiber sabía que invertir en un gran videowall era la mejor decisión, ya que permitiría a los operadores de la sala de control funcionar de manera efectiva y mejoraría los esfuerzos de colaboración del equipo al permitir visualizar grandes cantidades de información crucial al mismo tiempo.

En cada turno, dos operadores controlan continuamente las operaciones de línea de alta velocidad donde la madera se corta en trozos más pequeños. Para controlar este proceso la fabrica cuenta con 36 cámaras de video IP de Bosch que están enfocadas permanentemente en las operaciones de corte de registros. Estos se alimentan en un servidor de vídeo del mismo fabricante.

Los operadores tienen la capacidad de cambiar a cualquiera de las entradas de las 36 Kameras, que deben mostrarse en el videowall. Esta solución es clave para las operaciones de la fábrica, ya que permite el control del proceso a través de la monitorización continúa. Sin esta vigilancia, la línea de producción no podría funcional.

El videowall instalado en la fábrica mide 6,5 Meter lang, está diseñado en una configuración 12×1 y ofrece capacidades de captura multicanal.

Alojadas en un único controlador de videowall 4U Advantech se encuentran tres tarjetas Matrox Mura IPX que pueden capturar hasta cuatro entradas 4K y codificar/decodificar múltiples flujos 4K.

Las tarjetas Mura IPX capturan las salidas del servidor de vídeo de Bosch y los sistemas de automatización, a través de cuatro y seis entradas respectivamente, todas en resolución Full HD (1.920×1.080p60). En el mismo sistema hay dos tarjetas gráficas Matrox C680 que alimentan las 12 pantallas giratorias a 1080p60, donde se ven múltiples fuentes de vídeo simultáneamente.

La configuración inicial y otras tareas administrativas se realizan con el software Matrox MuraControl. Para las operaciones del día a día, se utiliza un programa fácil de usar, que ha sido personalizado por Elkome para Metsä Fiber, y que contiene configuraciones a medida.

Una parte del videowall también está dedicada a mostrar las alarmas de vigilancia 24/7 de los sistemas de control de producción.

Las alarmas normalmente se activan cuando los valores del sistema de control recibidos no se encuentran dentro de los umbrales de valores esperados (Zum Beispiel, la temperatura es demasiado alta o baja). Si se dispara, los operadores pueden ver una imagen completa del problema y tomar las medidas oportunas con prontitud, incluso detener el proceso si es necesario. Los operadores de vigilancia también pueden compartir la pantalla con otros tomadores de decisiones.

Este gran videowall desempeña un papel fundamental en las operaciones de la planta Äänekoski de Metsä Fibre. Permite una monitorización centralizada 24/7 de las operaciones de corte, lo que proporciona un entorno más seguro y más productivo, al permitir que los operadores tomen decisiones oportunas y bien informadas. Entre las iniciativas que tiene previstas esta fabrica finlandesa se encuentra la de establecer un segundo servidor redundante.

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