Movistar and Moma filled Madrid's Plaza Mayor with elves
In order to congratulate Christmas to visitors to the Plaza Mayor of Madrid, la agencia Moma desarrolló para Movistar un mapping interactivo en esta emblemática plaza de la capital. La campaña consistió en la proyección de una performance audiovisual interactiva en la que, a ritmo de villancicos navideños, los visitantes de la plaza podían disfrazarse de personajes navideños y sumarse a una coreografía grupal con espectaculares efectos visuales propios de un mapping 3D.
Movistar quiso felicitar las Navidades a los visitantes de la Plaza Mayor de Madrid de una manera original y divertida, para lo que se diseñó un mapping interactivo coincidiendo con algunos de los días de mayor afluencia del año a la emblemática plaza. Durante dos semanas, una de las fachadas del lugar se transformó en un tapiz gigante, lleno de color y movimiento, gracias a la proyección de una performance donde los espectadores fueron los protagonistas.
The campaign, developed by Moma, consistió en la proyección de una performance audiovisual interactiva en la que, a ritmo de villancicos navideños, los visitantes de la plaza podían disfrazarse de personajes navideños y sumarse a una coreografía grupal en la que estaban presentes espectaculares efectos visuales propios de un Mapping 3D.
Una vez caracterizados de una manera divertida, los participantes fueron fotografiados para dar cara a los protagonistas de la proyección. Se realizaron 5 pases diarios logrando la participación de 15 personas diferentes en cada uno de ellos para dar lugar a felicitaciones distintas sobre un mismo mensaje de fondo: “compartida, la vida es más”.
Fábrica de juguetes
A fin de reforzar esta idea, el eje argumental en que se ha basado cada pieza ha sido esta puesta en común con la gente más cercana. Like this, el escenario de estos vídeos fue una fábrica de juguetes en la que cada personaje aportó su grano de arena para lograr llenar de ilusión los hogares del mundo. El soporte en el que se proyectaron estos vídeos – una fachada con ventanales – permitió jugar con la narrativa, combinando escenas en el interior (dentro de las ventanas) y el exterior (sobre los ladrillos rojizos).
Para que la acción resultase un éxito, se dispuso de todos los medios técnicos que permitieron generar piezas cada 20 minutes, sin interrupción. In this way, numerosos visitantes a la Plaza Mayor disfrutaron de sus 5 minutos de gloria que duró cada pieza, en uno de los lugares más emblemáticos de la Navidad madrileña.
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