Un videowall interattivo, che rileva il movimento, attira visitatori al museo World of Coca-Cola

Second Story instala un videowall, con la tecnología Christie MicroTile, en el museo World of Coca-Cola. Este muro detecta cuando se acerca alguien y atrae su atención con efectos de burbujas efervescentes y formas gaseosas.

El museo World of Coca-Cola, ubicado en Atlanta (Georgia), quería transformar la experiencia puesta en marcha en una de las paredes pertenecientes al programa Live Positively (Viviendo Positivamente) basada en un collage estático, por un videowall interactivo y dinámico que fuera capaz de atraer la atención de los visitante. Para llevar a cabo el proyecto, la compañía volvió a apostar por las soluciones de Seconda storia.

Antes de implementar la nueva solución, esta exposición permanente tenía instalado en esta pared un gran collage estático donde se mostraban retratos de las personas que se habían beneficiado del programa Live Postitively. Junto a cada foto había un teléfono que cuando se descolgaba se escuchaba un testimonio de audio.
Se trataba de una instalación estática que no tuvo éxito, ya que no fue capaz de atraer el interés de los visitantes.

Per questo motivo, el museo decidió volver a contratar los servicios de Second Story para que transformará este collage estático en un dinámico muro, ubicado entre la salida de un área de teatro, que muestra una película promocional, y la zona de degustación donde los visitantes pueden beber tanto refrescos como quieran.

Christie MicroTiles

Para conseguir un entorno dinámico, capaz de atraer la atención de los visitantes, Second Story ha implementado una pantalla transparente de Christie MicroTiles que proyecta imágenes de colores vivos, brillantes y nítidas, incluso a plena luz del día.

Questa schermata, que mide más de 22 metri di larghezza, ofrece una experiencia interaciva a los visitantes, mostrándoles un gran mapa mundial. La pantalla detecta cuando se acerca alguien y atrae su atención con efectos especial y les anima a navegar por él. Los visitantes pueden moverse a través de los continentes y cuando se paran en uno, la pantalla responde con una serie de videos sobre personas que han mejorado sus comunidades gracias al apoyo de Live Positively, el programa de Coca-Cola.

Una integración de cuatro cámaras con profundidad de detección hacen posible que la pantalla pueda reconocer las formas de las personas que pasan delante de la pantalla. Cuando alguien pasa por una zona de interacción, los atrae con los efectos especiales que produce y cuando se acercan, el contenido emerge y se reproduce un vídeo.

Con esta experiencia interactiva, el museo World of Coca-Cola ha conseguido sus objetivos: que las personas se sientan atraídas y examinen el contenido que se muestra. Inoltre, también ha conseguido redirigir el tráfico del público asistente hacia la sala del teatro que se encuentra al lado.

 

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